3 de junio de 2021

LA GUERRA TRAS LA PAZ: UNA OLA DE VIOLENCIA SEXUAL ARRASA TIGRAY

de ANUE

Fuente: Associated Press / Ben Curtis

Autora: Irene Delgado Moreno. Periodista y estudiante del Máster de Relaciones Internacionales, Seguridad y Desarrollo (UAB). Redactora de DH-Fuente de Vida.

Abstract

Español

La región etíope de Tigray acumula 2.000 muertos y casi dos millones de desplazados siete meses después de la ofensiva del gobierno central, apoyado por Eritrea. En esta espiral de terror, las violaciones y abusos sexuales horrorizan por su brutalidad y carácter sistemático. La violencia sexual se ha convertido en un arma de guerra que los soldados eritreos perpetran con total impunidad. La presión internacional para que el primer ministro etíope Abiy Ahmed Ali tome medidas efectivas es cada vez mayor ya que el conflicto amenaza con sumir a la región en una catástrofe humanitaria.

Català

La regió etíop de Tigray acumula 2.000 morts i gairebé dos milions de desplaçats set mesos després de l’ofensiva de el govern central, recolzat per Eritrea. Enmig d’aquesta espiral de terror, les violacions i abusos sexuals horroritzen per la seva brutalitat i caràcter sistemàtic. La violència sexual s’ha convertit en una arma de guerra que els soldats eritreus perpetren amb total impunitat. La pressió internacional per a què el primer ministre etíop Abiy Ahmed Ali prengui mesures efectives és cada vegada major, ja que el conflicte amenaça amb sumir la regió en una catàstrofe humanitària.

English

The Ethiopian region of Tigray accumulates 2,000 dead and almost two million displaced seven months after the offensive of the central government with the support of neighbor Eritrea. Amidst this spiral of terror, a tide of rape and sexual abuse horrifies observers due to their brutality and systematic nature. Sexual violence has become a weapon of war that Eritrean soldiers perpetrate with impunity. International pressure for Ethiopian Prime Minister Abiy Ahmed Ali to take effective action is mounting as the conflict threatens to plunge the region into a humanitarian catastrophe.

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